La etapa infantil es una de las más importantes para el desarrollo de los dientes, por ello, es donde debemos de prestar gran atención a la salud bucodental de nuestros pequeños.
Muchos padres saben esto, pero pueden encontrarse un poco perdidos a la hora de enseñar a sus pequeños los correctos hábitos bucodentales, sin saber que métodos de enseñanza deben utilizar para que sus pequeños cojan bien dichos conceptos y los lleven a cabo.
En Clínica Dental Augusta llevamos mucho tiempo especializándonos en odontopediatría, enseñando así a pequeños visitantes que han querido hacernos una visita los buenos hábitos de higiene bucodental.
Hoy queremos hacerte una pequeña guía de los aspectos que debes de tocar y cómo debes de enseñarle a tu hijo para que goce de una sonrisa sana y bonita.
Conceptos del cepillado de dientes
Por supuesto, una de las primeras cosas que debe de aprender el niño es a cepillarse los dientes correctamente.
De primeras puede parecer algo sencillo, pero algunos niños suelen oponer resistencia a ello ya que es algo nuevo para ellos y pueden tener a no querer realizarlo.
Por eso mismo, para que el niño se familiarice más fácilmente, al momento de adquirir un cepillo de dientes es recomendable comprarlo con una temática de dibujos que le guste para que así le sea más atractivo este nuevo instrumento.
En el caso de los niños, deberá de ser un cepillo de dientes que cuente con cerdas suaves, ya que los cepillos que tienen una gran dureza pueden llegar a causar irritación en sus encías y molestias, y esto puede llevarles a querer evitar cepillarse los dientes.
Una vez que cuente con el cepillo adecuado, deberá de emplear una pequeña cantidad de pasta dental con flúor hasta que cumpla los 3 años para asegurar una correcta protección de sus dientes frente a la placa bacteriana.
Es importante que lleve flúor, ya que además de ofrecerle una mayor protección frente a las bacterias también este fortalece el esmalte dental.
La primera vez, deberás de cepillarle tu mismo con su cepillo para que vea como debe de sostenerse el cepillo de dientes y cómo debe de cepillarse para eliminar así la placa bacteriana de forma efectiva.
Cuando le estés cepillando los dientes, pregúntale a tu hijo en todo momento, si está bien, si se siente incómodo o si le duele.
Una vez que el niño haya aprendido a cómo debe de cepillarse los dientes y se haya adaptado, lo cuál deberá de hacer al menos dos veces al día, deberás de enseñarle como usar otro instrumento fundamental, el hilo dental.
Algo recomendable es acostumbrarlo a realizar el cepillado de dientes a unas horas concretas, para que así vaya cogiendo poco a poco el hábito de hacerlo.
También debes de contarle el riesgo que tiene no realizarlo, haciendo hincapié en que las bacterias podrían destruir sus dientes desembocando así en enfermedades bucodentales como las caries.
Cuidado con los alimentos
Otro aspecto a tener en cuenta es educarle acerca de los alimentos, ya que muchos de ellos pueden ser muy perjudiciales para sus dientes.
El consumo de alimentos ricos en azúcares ayuda a que las bacterias que causan las caries crezcan rápidamente, esto es algo muy importante de recalcar ya que por todos es sabido que los niños aman los dulces.
De igual forma, debes de advertirle acerca de los refrescos ya que tienen también un alto contenido de azúcar, el alimento preferido de las bacterias.
Las chuches y gominolas también tienen que tener unas limitaciones, ya que pueden adherirse a los dientes y convertirse en un auténtico festín para las bacterias.
Intenta que tu hijo consuma alimentos que ayuden a fortalecer sus dientes y encías, como sería el caso del queso, ya que proporcionan calcio para aumentar la dureza de los dientes.
Las verduras son otra opción muy beneficiosa para tus dientes, ya que aumenta la salivación, lo cual ayuda a retirar los pedazos de alimentos que se hayan podido quedar anclados y limpia los dientes de forma natural.
No olvides visitar a tu dentista de confianza con regularidad
No por nada esto es algo que siempre recomiendan los odontólogos, ya que lo único que les ofrece a los niños son beneficios. Estos, no solo podrán educar al niño con buenos hábitos bucodentales, sino que además revisarán que el estado de su boca esté en perfecto estado para evitar así la aparición de posibles enfermedades bucodentales.
Si le enseñas todos estos conceptos a tu pequeño y este lo aplica, te podemos asegurar que gozará de una sonrisa sana y bonita.
Si tienes alguna duda acerca de cómo enseñarle a tu pequeño a hacer una correcta higiene bucodental, no dudes en consultarnos.